En Moscú, en la sede de la agencia RIA Novosti se celebró una mesa redonda dedicada al problema y las posibilidades de la diversificación de las exportaciones de Rusia, con la participación de especialistas nacionales y de tres expertos del Banco Mundial.

Valga destacar que no fue en absoluto formal la participación de expertos del Banco Mundial. Pues, ellos expusieron un detallado informe, preparado por la prestigiosa institución financiera sobre la diversificación de las exportaciones rusas, mediante el desarrollo de la competencia y de las innovaciones.

El tono de la discusión lo dio el uruguayo Álvaro González, economista del Departamento de Desarrollo del sector privado y financiero de la Región de Europa y de Asia Central del Banco Mundial. En su informe, Álvaro González mostró con cifras y hechos que, en las últimas décadas, la base de exportación de Rusia se restringió considerablemente. Por otra parte, la capacidad competitiva del sector no petrolero difiere el de Rusia desventajosamente del de Brasil.

Y ya que mencionábamos a Brasil, según las conclusiones de los expertos del Banco Mundial, el análisis efectuado muestra que el coeficiente de exportaciones a Rusia es inferior al de Brasil y de otros países del Grupo BRICS, de China y de la India. En general, se planteó claramente la tesis de que, hoy en día, las posibilidades de Rusia de ampliación de la nomenclatura de las exportaciones y de la conquista de nuevos mercados, son notablemente inferiores de las posibilidades que disponen los socios del BRICS.

Esta conclusión se basa en hechos concretos. Es de todos conocido que, los rubros principales de las exportaciones de Rusia son el petróleo y el gas, por consiguiente, la infraestructura creada para la realización de operaciones de comercio exterior con estos productos no puede ser empleada en otros ejes de la exportación.

Con no menor agudeza están planteadas las cuestiones relacionadas con la innovación y la competencia, expuestas en la ponencias de los otros dos especialistas del Banco Mundial: del brasileño José Guilherme Reis, economista del Departamento de Comercio Internacional del Banco Mundial, y del francés Jean Louis Rasin, especialista para asuntos de la ciencia, de la tecnología y de las innovaciones del Departamento de Europa y de Asia Central.

El balance de discusiones de las casi dos horas de la mesa redonda se puede reducir al siguiente resumen. Los expertos rusos pusieron en alta estima el informe del Banco Mundial acerca del estado de nuestras exportaciones y las posibilidades para su diversificación, aunque no concuerdan con todas las conclusiones. Sin embargo, nadie objetó contra el hecho que, para una diversificación exitosa de las exportaciones es indispensable, sobre todo, resolver las siguientes tareas:

Primera: la elaboración de nuevas mercancías, para la ampliación de su base, y por ende de una nueva nomenclatura de exportación.

Segunda: la asistencia a las nuevas empresas en la incursión en nuevos mercados de exportación con nuevas mercancías y el arraigo en esos mercados.

Tercera: conservar la capacidad competitiva de la exportación nacional actual en los mercados foráneos existentes.

Y por último: el desarrollo de una economía sana que estimule a las empresas a elevar la eficacia de su actividad y contribuya al mejoramiento de los factores básicos mencionados.

Esto en líneas generales porque, resumiendo, el nuevo gobierno que se forme tras la investidura del 7 de mayo por el presidente electo, Vladímir Putin, tendrá en qué trabajar, en aras del fortalecimiento de las posiciones exportadoras de nuestro Estado.

Por lo demás, los responsables actuales del bloque económico del poder ejecutivo tuvieron también la posibilidad de escuchar a los expertos del Banco Mundial y de intercambiar opiniones con ellos. Pues, entrevistas de esa naturaleza contemplaba también la agenda de la visita a Moscú de la delegación del Banco Mundial.

En entrevista con nuestro corresponsal Víctor Sújov el economista Álvaro González lo comentó con más detalle.