–Me dirijo a todos vosotros, mis queridos hermanos y hermanas, con nuestro tradicional saludo pascual : “¡Cristo ha resucitado!” . Estas palabras se remontan a los días de los santos apóstoles y contienen la verdad divina y la constatación de un hecho histórico. En efecto, dos mil años han pasado, pero nadie puede decir que esta frase haya perdido su relevancia. Nadie ha tenido fuerza ni ocasión para hacerlo. Sigue viva y actual. Y, ya por ello,representa una manifestación de la verdad y el poder divinos. Este saludo que os acabo de dirigir y que vais a repetir entre vosotros, encierra una gran esperanza. Porque Jesucristo que no tenía pecados, no tenía culpa alguna ante las personas ni ante Dios, fue, sin embargo, crucificado. Y antes de morir en la cruz, fue martirizado, torturado y humuillado.

¿Cuántas veces nos apenamos, lloramos y perdemos la esperanza al atravesar por los sufrimientos de esta vida, sobre todo si el dolor que experimentamos nos ha sido causado por una persona? Nos parece que no debieramos ser víctimas de la injusticia, porque no nos la merecemos. Nos resistimos a los tratos injustos. Los creyentes a menudo asociamos las humiliaciones que sufrimos con el vía crusis de Jesucristo.

Entonces, ¿por qué el saludo apostólico “¡Cristo ha resucitado!” es un signo de esperanza para nosotros? Por la simple razón de que Cristo fue martirizado siendo absolutamente inocente, y, cada vez que nos enfrentamos a la injusticia, calumia o maltrato por parte de alguna persona, tenemos que recordar a nuestro Redentor. Después de todo, cualquier persona que sufra injustamente tendrá algún pecado, algo que haya hecho mal, algún error que haya cometido. Y ya por ello puede considerar el dolor que sufre como un castigo por su conducta impropia. ¿Pero qué hace Cristo que no ha cometido ningún acto incorrecto, ni ha mentido nunca? Acepta el reproche de los humanos e incluso su propia muerte sin culpa alguna. Y, al pasar él mismo por el camino del martirio, nos llama a seguirlo recordando que después de la muerte en la cruz está la resurrección. Al resucitar, Jesucristo triunfó sobre las calumnias y mentiras humanas.

Y al decir este día con fe y esperanza “¡Cristo ha resucitado!”, los cristinaos ortodoxos confiamos en que somos herederos y sucesores de la causa divina que el Señor ha legado a sus apóstoles. Así que para nosotros, el Domingo de Pascua de la Resurrección es un día de gran esperanza que debe fortalecernos para soportar las penas, superar las dificultades, vencer la injusticia humana y seguir adelante recordando que Cristo ha derrotado el mal. Esto significa que debemos combatir el mal en nuestra vida a través del poder de Dios, el poder de la oración y la fe. Por eso consideramos el Domingo de Pascua como una fiesta de esperanza para todas las personas.

Me gustaría compartir con vosotros el júbilo de esta fiesta y la alegría de la esperanza cristiana. Os deseo que esta esperanza os llene de fuerzas para seguir el camino de la vida alumbrado por la imagen magestuosa, brillante y eterna de Cristo resucitado.

¡Cristo ha resucitado! ¡En verdad, ha resucitado!

El XI Festival de Pascua de Moscú se inauguró oficialmente en la Catedral de Cristo Redentor con una interpretación de Stabat Mater del Metropolita Hilarión.

La obra se basa en el texto del siglo XIII en el idioma latin. Se habla de la heroicidad y de la oración de la Virgen María en la cruz de Cristo. En el festival toman parte más de veinte de los mejores coros de iglesias de Rusia, Ucrania y otros países.

El delantero del Barcelona se destacó en el partido de la vigésimo novena jornada de la liga española contra el Celta de Vigo. Este fue el único club de la liga superior al cual el delantero aún no le había marcado ni un gol en esta temporada.

Además Messi agregó a su biografía un logro más: el haber perforado las porterías en diecinueve enfrentamientos seguidos.

Ahora Messi ya tiene cuarenta y tres goles anotados por lo que encabeza con solidez la lista de goleadores de la liga de España. Cristiano Ronaldo solamente ha anotado veintiocho goles.

En la mitad del segundo tiempo los rusos metieron un gol: se distinguió Víctor Fauzulin. Tan solo en el tiempo añadido los cinco veces campeones del mundo supieron evitar la derrota, gracias al preciso golpe de Fred.

Para la mayoría de los jugadores rusos fue el primer encuentro con los brasileños. Ellos estaban sumamente motivados y ya para el minuto 15 crearon 3 o 4 situaciones favorables. Luego los brasileños tomaron la iniciativa en sus manos. Pero los rusos formaron una buena defensa y a la primera posibilidad organizaban contraataques, que eran más agudas que los que creaban los brasileños delante de la portería de Vladímir Gabúlov.

En el minuto 71 los rusos supieron organizar un buen ataque largo y masivo que culminó con el gol de Víctor Faizulin. He aquí la opinión de Evgueni Lóvchev, extitular del Spartak y de la selección soviética sobre este momento:

–Cuando los nuestros metieron el gol, a decir verdad, estaba riéndose porque nunca antes había visto a los brasileños tan impotentes a los que se obligó a correr por su área de castigo y por fin se los “puso al paredón” y se les metió un gol. Pero en los brasileños, virtuosos del balón, se despertó el sentimiento de honor por su fútbol.

Comenzaron a jugar más rápido. Se distinguía en especial el “fresco” Halk, internacional del club Zenit de San Petersburgo. Comenzó a sentirse que la defensa rusa estaba cansada. Y en el tiempo añadido Fred metió un gol de una distancia corta después del buen pase de Marcelo.

Tras el partido el entrenador de los “pentacampeones” Luis Felipe Scolari elogió a la selección rusa.

–Se nos enfrentó un equipo muy bien organizado que al propio tiempo sabe jugar impulsivamente. No es casual que los rusos jueguen bien las eliminatorias del mundial. Se ve que saben qué hacer en el césped.

Pero se trata apenas de un partido amistoso. Aquí no importa tanto el resultado cuanto la calidad del juego. Fue interesante comparar el nivel de los rusos con el de los brasileños. Resumiendo se puede decir que Rusia aguanto bien esta seria prueba. Sí, los brasileños tienen una técnica mejor, dominan mejor el balón. Pero la selección rusa parecía más organizada, más disciplinada y mejor en sentido táctico.